Aunque el título hace referencia a un modelo específico, todo lo que se hable aquí hace referencia a todos los modelos, se llamaran como se llamaran, que Polaroid sacó al mercado con la denominación SX-70 y con la tecnología del enfoque automático mediante sónar pues, a pesar de los nombres y los acabados, todas eran iguales por dentro. Dejaremos para otro momento, si llego a tenerlas, las que no llevaban esta tecnología de enfoque o el modelo 3 que, además, no era réflex.
Si no recuerdo mal, fue en 1972 cuando Polaroid sacó al mercado la primera Polaroid SX-70, la cámara réflex instantánea, de la cual decían que cabía en un bolsillo. Yo nací en 1969 y no recuerdo que los bolsillos fueran tan grandes como para meter una tochana partida por su eje longitudinal pero, con esto de la publicidad, ya se sabe.
El caso es que apareció en el mercado un icono que, con el tiempo, se ha covertido en una leyenda de la fotografía. También ayudó que grandes «artistas» del momento la usaran, sin algún disimulo, para sus creaciones más vanguardistas e insolentes, creando lo que se conoció entonces como el «Pop art».
La cámara salió en varias versiones según la pasta que quisieras gastarte en ella pero, en el mejor de los casos igual hablamos de unos 250 dólares americanos, en 1972. Entonces, el dólar, cotizaba a 64,47 pesetas, lo que la cámara venía a costar 16120 pesetas, lo que vienen siendo uno 100 euros. Teniendo en cuenta que en 1972 el sueldo mínimo interprofesional (SMI) sería de unos 24,52 euros, hacían falta 4 sueldos completos para poder comprar el modelo más básico. Todo un lujo que muy pocas familias españolas podían permitirse. Por especular…Hoy, 23 de mayo de 2023, el SMI es de 1080 euros, lo que situaría el precio de la cámara en unos 4320 euros, sin tener en cuenta la inflación de estos últimos 51 años. Y todo esto teniendo en cuenta que aún faltaban 6 años para que Polaroid sacara al mercado la Polaroid SX-70 Sonar, con enfoque automático, la cual, igual ya no costaba 250 dólares americanos.
Quizás ahora se comprenda la leyenda de este modelo y los precios que alcanzan en el mercado de segunda mano.
El modelo que me interesa a mi es el que incorporaba el enfoque automático mediante sónar. Ya he hablado de este sistema en los artículos anteriores, cuando se incorporó en modelos más sencillos como en la Polaroid 670 o la Impulse AF pero, esta vez no hablamos de cámaras con sus elementos ópticos de plástico. Hablamos de elementos de cristal óptico y combinación de espejos. Luego, los acabados de cada modelo podían ser metál, plástico, vinilo o piel pero, el interior de todas ellas era el mismo.
La tecnología SONAR fue presentada en sociedad en 1978, por lo que todas las cámaras SX-70 anteriores a este año carecían de enfoque automático. El objetivo giraba mediante un motor hasta enfocar la distancia que el sónar le mandaba. Como hacen las réflex actuales pero, con otro sistema que no es por ultrasonidos. Parece una chorrada en 2023 pero, tengamos en cuenta que no fue hasta 1981 cuando Pentax sacó al mercado la primera cámara réflex con enfoque automático y Nikon no lo hizo hasta 1988. El caso es que Polaroid se adelantó varios años a la competencia. Y también es verdad que, llegado a este punto álgido tecnológico, no volvió a innovar, nunca más, en la fotografía instantánea.
Como decía, en un principio, se podía elegir con y sin auto enfoque. Pero, las que disponían de él también se podían usar con enfoque manual. Tengamos en cuenta que el sónar dará la distancia al objetivo de lo primero que detecta por cercanía, así que si la ponemos en modo manual podemos ser mucho más precisos en el enfoque o en lo que queremos que quede enfocado.
Hay para escribir varios libros al respecto pero, mi intención es solo la de mostrar estas cámaras, no solo como objetos de colección sino, para uso esporádico y provocar el asombro en los testigos de nuestra gesta fotográfica. ¿Se imaginan aparecer con esta maravilla ante un grupo de turistas, todos con sus Nikon y sus Canon de última hornada fotografiando la Pedrera o el Ángel caído, y nosotros desplegando el mamotreto para tener la fotografía en papel al momento? (bueno, al momento tampoco que con la mierda de los cartuchos actuales, puede tardar entre 20 y 30 minutos en completarse el revelado, cuando con los originales de antaño tardaban 3 minutos). Uno de nosotros debería estar fotografiando las caras de los presentes en ese momento.
Bueno. Menos rollo y vamos al lío.
La que van a ver aquí es la tercera que compro. La primera se estropeó y, aunque la vendedora me dió la opción de devolverla, preferí probar a desmontarla y arreglarla hasta su muerte definitiva. Moraleja: Si no sabes, no toques, caca. Pero, aprendí mucho de lo que había dentro y de como funcionaba el meollo.
Sin embargo, la segunda, nunca funcionó. A pesar de su buen estado estético, ninguno de sus motores funcionaban. Ni el de arratre de las películas ni el del auto enfoque. Así que tramité la devolución por Wallapop y el vendedor, sin tener la obligación de hacerlo porque ya la compré sin que se hubiera probado su funcionamiento, aceptó la devolución. Pero, me dió tiempo a sacarle unas fotos. Actualmente estoy a la espera de recibir otra que si sabemos, con total certeza, que funciona correctamente pero, no me llega hasta mañana.
Ya la tenemos aquí. Las primeras fotos son de la que mencionaba antes que no funcionaba en absoluto pero, como de la que me ha llegado funcionando no tengo la caja, me ha parecido oportuno mostrar la presentación.


Fíjense que ambas cámaras son exactamente iguales, variando solo el nombre del modelo. Al final del reportaje pondré una foto frontal de esta para que puedan compararla con la que da nombre al título.

Ahora si. Esta ya es la Polaroid SX-70 Sonar OneStep.
Se puede apreciar que está en bastante buen estado, a pesar de que no ha venido con ninguna caja ni funda. No recuerdo de donde era el vendedor pero, cuando miro en Wallapop este tipo de artículos procuro no comprarlos si están en alguna provincia marítima pues, el salitre es mortal para los acabados metálicos y para el sistema interno de la cámara.




Para ponerla en marcha tenemos que desplegarla y esto se hace tirando hacia afuera de la parte donde está el visor. Teóricamente debería hacerce desde la parte posterior pero, en esta unidad, es más fácil levantar primero la parte delantera del fuelle y después terminar desplegándola por completo tirando de la parte posterior.

Y aquí la tenemos. Lista para fotografiar.



Al contrario de las que adoptaron este sistema de enfoque en años venideros, más «modernas» y baratas, como las Polaroid Impulse AF o la Polaroid SuperColor 670 AF, cuyas ópticas eran las típicas de plástico y que cuando se acciona el enfoque automático no percibimos ruido, vibración ni movimiento alguno, en estas el funcionamiento del enfoque automático se percibe perfectamente pues, al pulsar el disparador en su primer tiempo, el sónar hace la medición y manda la información al motor, el cual hace girar el objetivo hasta que sus ópticas se alinean para enfocar a la distancia correcta.
Si en ese momento soltáramos el disparador, en lugar de seguir pulsándolo en su segundo tiempo para hacer la foto, todo el sistema se reinicia, volviendo el enfoque a su posición de reposo y, por lo tando, el motor vuelve a dejar las ópticas en su posición original. El enfoque automático nunca queda fijado si no tenemos el disparador pulsado.
¿Qué quieren que les diga? Me fascina este sistema. ¿Han tenido en cuenta que con este sistema no hace falta nada de luz para poder enfocar y hacer la foto (con flash) pues, los ultrasonidos no dependen de ella? Podríamos tomar una fotografía a un objeto que sabemos que tenemos delante en una habitación completamente a oscuras y quedaría perfectamente enfocada.

Como se puede apreciar, tal como decía más arriba, la única diferencia entre los distintas cámaras que fueron sacando del Modelo 2 con sónar, estriba en el nombre y cambio de estética de su rotulación. Esta que ven aquí abajo es la que estaba guardada en la caja de la primera foto. La que no funcionaba en absoluto.

Como no podía ser de otra manera, vamos a ver que es todo esto que le vemos delante a la Polaroid SX-70 Sonar OneStep.

Quizás, así se vea mejor la zapata del flash.


Disponían, también, de la rosca estándar para poder fijarlas a un trípode. Esto era común en todos los modelos.

Para volver a plegarla y «apagarla» basta con apretar esta platina, una de las dos que la mantiene abierta, hacia atrás, en el sentido que indica la flecha.

Y una vez plegada, solo tenemos que apretarla hacia abajo desde el fuelle del visor para que las sujeciones internas la mantengan completamente plegada. Lo sabremos por los «clicks» caranterístos que oíremos y notaremos.


Ya puestos al trasteo de la cámara, déjenme que les muestre como se abre el alojamiento del cartucho, ya sea para estraerlo o para insertar uno nuevo.
Pulsaremos esa palanquita amarilla que veremos en el costado derecho de la cámara, cuando está abierta.

Y así se nos abrirá la tapa del compartimento del cartucho. Es posible que tengamos que ayudarla un poco, dependiendo de la rigidez de sus bisagras. Esto es empujándola suavemente hacia abajo mientras se pulsa la palanquita amarilla.
Si. Ya lo se. Es la chunga. No es la del título. Y desconozco la razón por la que en la etiqueta amarilla y azul del interior no está la información del tipo de cartucho que deba llevar y la ubicación de donde se fabricó esta unidad. Solo he querido aprovechar la foto para mostrar donde se aloja el cartucho. ¡Otras, es que están en todo!

En esta ocasión, lo que si me vino con la cámara fue su correa original, completamente deformada por haber estado plegada durante décadas y reseca pero, la enderecé lo máximo que pude y la mantuve colgada de una percha de pared durante 24 horas para que volviera, en la medida de lo posible, a su estado original. He encontrado dos en Wallapop con unos precio de 25 y 35 euros, por lo que me parece un estupendo accesorio original. De lo contrario, hubiera tenido que comprar una de esas dos o ponerle una correa moderna, lo cual no me hace ninguna gracia.

La manera de poner la correa también tiene su «intríngulis». La comodidad nos dice que las pongamos de arriba hacia abajo. Efectivamente, es mucho más fácil de poner los anclajes a la cámara pero, cuando la llevamo colgada, enseguida nos damos cuenta que la cámara está cogida por la parte más alejada de nuestro cuerpo y nos cuelga de forma un tanto extraña. Lo suyo sería que los anclajes de la cámara estuvieran en la parte contraria para que colgara de la parte interna. Pero, esto no es posible. Los han puesto ahí y, claro, son inamovibles.
Así pues, para minimizar esa «incomodidad», he preferido anclar la correa al revés, de abajo hacia arriba. Esto dificulta un poco su colocación pero, con paciencia y saliva…





Bien pues, ya la temos lista para sacarla a la calle para cazar imágenes. Además, de sonsacar una infinidad de sonrisas melancólicas de los que la han tenido y muecas de asombro de los que no entienden que hacemos con semejante trasto colgando del cuello. Y si la abres…Ni te cuento.


Pues, esta es la famosa Polaroid SX-70, en su versión «Model 2» y modelo Polaroid SX-70 Sonar OneStep. No se de que año es exactamente pero, tampoco me supone un trauma este desconocimiento. Seguramente seguiré buscando información para ir completando las lagunas que se han ido creando y, si hay tiempo, la iré implementando en el artículo.
En los próximos días, iré haciendo alguna que otra entrada más, sobre algunos accesorios que he ido consiguiendo de esta cámara. Algunos de ellos, me han parecido de lo más curiosos. Un saludo y muchas gracias.
Hola:
De nuevo, un buen repaso a una Polaroid. Como desconocedor profundo de todas estas cámaras, lo primero que me llama la atención es la notable diferencia en aspecto de todas las presentadas anteriormente. Queda patente la vetustez de este modelo, muy anterior a las otras, donde el plástico domina la escena.
El artefacto en sí mismo es sumamente atractivo, con esa geometría desplegable tan aparatosa y enrevesada. Cuesta creer que se consiguiera una óptica precisa con tantos posibles desajustes y holguras. Desde luego, nada que que ver con la integración y precisión casi monobloque de las cámaras modernas.
Solo queda ver alguna imagen tomada por esta cámara, aunque quizá sea una buena idea una entrada dedicada a comparar una misma toma realizada con cada una de las máquinas Polaroid que se han presentado, en orden cronológico o tecnológico.
Saludos.
Buenos días, Salvador.
Se trabajaba de otro modo.
Tener una foto de cada cámara para hacer comparaciones es algo que, de momento, va a ser difícil debido al coste que supondría hacerlo. De esta cámara tienes las fotos que publiqué en el artículo del filtro del cartucho Polaroid 600 para poder usarlo en las Polaroid SX-70. Un saludo y muchas gracias.