Con está cámara me pasa algo muy curioso. Nadie se pone de acuerdo en el año de presentación. En algunas páginas de compra-venta he visto el año 1976, en una sobre este modelo decían que 1977, sin embargo el sistema de enfoque automático por sónar de Polaroid no se presentó en sociedad hasta 1978, y en esto si que coinciden varias webs miradas. Finalmente he visto otra web, cuya información me parece la más coherente, que dice que esta cámara se fabricó desde 1978 a 1985 pero, teniendo en cuenta que también existe la Polaroid PolaSonic Autofocus 5000, sin diferencias técnicas, que yo sepa, entre ellas, me parece un rango de tiempo muy largo para la 4000. Quizás, al ser cada una de un color diferente, fueron coetáneas durante ese periodo, siendo la presentación de la 4000, como digo, en 1978 y, según lo visto por la Red, en 1980 para la 5000 pero, aún no he encontrado ningún sitio con los datos exactos de ambos modelos.
Bueno, al lío del montepío.
No tenía pensado adquirir esta cámara pues, de las que usan los cartuchos Polaroid SX-70 solo me interesaba la propia Polaroid SX-70 por lo icónica que nos resulta casi desde que salió al mercado en 1972 pero, yo quería la que disponía del sistema de enfoque automático por sónar. La razón es muy sencilla. Aunque aquí hay varios artículos sobre las Polaroid más extendidas, como la Supercolor 635 o la 636 Close up por poner algún ejemplo, lo que me fascina es el sistema de enfoque automático por sónar y, por lo tanto, teniendo en cuenta el espacio del que dispongo para esto, he delimitado mi «colección» a las cámaras Polaroid que integran este sistema, y de forma generalizada, quiero decir que con tener una de cada «familia» ya me conformo, porque si tuviera que conseguir una de cada modelo tendría que cambiar de casa.
Así que como conseguí una Polaroid SX-70 y, además, descubrí lo de modificar los cartuchos Polaroid 600 para usarlos en las cámaras que funcionan con cartuchos Polaroid SX-70, me dije que este modelo también podría formar parte de mi estante de Polaroids. Además, es un modelo que suele encontrarse a precios insignificantes, aunque este no es el caso, por lo que irán viendo en el artículo. Pero, las he visto (sin el ocular de goma) hasta por 14 euros y completas por entre 20 y 25 euros. Esta me costó 35 euros, 41,51 euros puesta en casa por Wallapop.

A mi me hubiera gustado más hacerme con la PolaSonic AutoFocus 5000 pero, por el simple hecho del color. Todas las Polaroids «auténticas» que tengo son negras, menos esta. Bueno, es un mal menor.

Como anteriormente ya había probado una Polaroid SX-70 con enfoque automático y, siendo cámaras réflex, vemos por el visor exactamente lo que «ve» la cámara por el objetivo, pensé que el enfoque automático de la Polaroid PolaSonic AutoFocus 4000, al no ser una cámara réflex, sería como en la Polaroid Impulse AF o como la Polaroid SuperColor 670 AF, en las cuales, cuando se aprieta el diparador en un primer paso enfoca automáticamente pero, no notamos ningún tipo de movimiento, vibración o sonido, por lo que nos tenemos que fiar de que la cámara ha hecho su trabajo.
En el caso que nos ocupa, parece ser un híbrido entre la Polaroid SX-70 y las AF mencionadas. Pero, de eso ya hablaremos más adelante.
Vemos que por detrás, la cámara es exactamente igual que las polaroid que conocemos de toda la vida. Encontramos el ocular, por el cual vemos, mediante el visor, lo que vamos a fotografiar pero, al no ser una cámara réflex, no estamos mirando por el objetivo de la cámara. Esto tiene sus desventajas. Al estar mirando la imagen a tomar desde unos centímetros del objetivo tenemos que contar con el paralaje, esto es la diferencia entre lo que vemos nosotros por el visor y lo que «ve» la cámara por el objetivo que, en definitiva, va a ser lo que salga en la foto. Cuanto más distante esté el motivo a fotografíar, menos notaremos este efecto. Pero, hay que tenerlo muy en cuenta cuando estamos fotografiando algo que esté muy cerca de la cámara pues, habrá que compensar el paralaje desplazando nuestra composición un poco hacia la izquierda.
Vemos también, a la derecha, el contador regresivo que nos dice cuantas películas quedan en el cartucho. Cuidado con esto porque con los nuevos cartuchos solo vienen 8 películas, en lugar de las 10 que traían originalmente, por lo que cuando insertamos un cartucho nuevo, el contador, se resetea y nos muestra el número 10. Con los nuevos cartuchos hay que tener en cuenta que la última foto será la número 3 y que cuando nos muestre el número 2 es que el cartucho ya está vacío.

Por el lado derecho de la cámara nos encontramos con el botón deslizante (hacia adelante) que nos abre la tapa del compartimiento donde se aloja el cartucho.

En la parte superior de la cámara nos encontramos con dos elementos muy importantes. El que más es el selector de enfoque automático o manual y, un poco más hacia atrás, tenemos la zapata para un flash exterior.

El selector de enfoque manual o automático, si lo dejamos en automático, evidentemente, la cámara usará el sistema de enfoque automático por sónar pero, si lo ponemos en manual seremos nosotros quienes, girando el objetivo de forma manual, deberemos enfocar el motivo a fotografiar pero, como no es una cámara réflex ese enfoque no podemos verlo por el visor, así que la única referencia que tendremos es la distancia que nos indica la rueda que tenemos justo delante del selector conforme vamos girando el objetivo.
En la foto podemos ver que el selector nos muestra una «A», esto nos indica que está en automático. En caso que estuviera en manual veríamos la distancia a la que está enfocando el objetivo.
Dada la dificultad para saber a que distancia tenemos un objeto, entre el enfoque mínimo y el infinito, se me hace difícil pensar que alguien haya usado alguna vez, de forma sistemática, la opción del enfoque manual en esta cámara. Hoy por hoy, a 2,5 «lereles» el apriete de botón, va ser que no seré yo quien haga las pruebas correspondientes.
¿Pero, qué pasa cuándo este selector está en la posición de enfoque automático, cómo en la foto? Bueno, aquí es cuando surgió la grata sorpresa, que hizo que me alegrara mucho de haber comprado esta cámara.
Como decía anteriormente, más arriba, cuando se pulsa en un primer paso el disparador, el sónar entra en acción y un motór mueve el objetivo para alinear las lentes para enfocar a la distancia que el sónar le está indicando y en la rueda de distancias veremos la distancia a la que está enfocando. Es una sensación de algo bien hecho. Actuamos y hay unas consecuencias palpables. Pero, así como en la SX-70, una vez enfocado sueltas el disparador y el motor de enfoque vuelve a su posición de reposo, en esta (al menos en esta unidad), cuando la cámara interpreta que el enfoque es el correcto hace la foto directamente. Por muy flojo que pulses el disparador. Y si ha enfocado y sueltas el disparador, el enfoque queda fijado y la cámara hace la foto igualmente. ¿Rudimentario? Puede ser pero, mola mucho, como todo lo electromecánico.

Y para teminar con este bloque de presentación, vamos verle el culo, para descubrir que no tiene agujero. Para el trípode, digo (marranetes).

Como también he comentado antes, esta cámara usa cartuchos Polaroid SX-70, que son algo más caros (si cabe) que los Polaroid 600. Si abrimos el compartimento del cartucho, veremos que no hay ninguna diferencia entre las cámaras que usan uno u otro cartucho. La diferencia estriba en la sensibilidad de la película, siendo la de los SX-70 de 100 ISO y de 680 ISO las películas Polaroid 600. Como no se puede ajustar la sensibilidad ISO en la cámara, cada una está diseñada para medir la luz en referencia a la sensibilidad de la película específica para ella, así pués, si pusiéramos un cartucho Polaroid 600 en esta cámara nos quemaría las fotos.
Actualmente existen varios modos de evitar esto y poder utilizar cartuchos Polaroid 600 en las cámaras que están hechas para los cartuchos SX-70. Algunos son cambios irreversibles en la propia cámara y otros, como el que yo quiero probar, se trata de poner un filtro ND (de densidad neutra) adecuado para que entre la luz justa para que la película pueda trabajar con la sensibilidad de la cámara. Aunque ya tengo estos filtros, que se ponen en el propio cartucho y son reutilizables, aún no lo he probado. Cuando lo haga, y si el resultado es satisfactorio, haré el artículo correspondiente con las pruebas.

Como en todas las cámara Polaroid «auténticas», tenemos la correspondiente etiqueta en el compartimento del cartucho, donde se nos informa del tipo de cartucho que hay que usar y dónde se ha fabricado la cámara.

Y, como no podía faltar, aquí tenemos los elementos de la cámara señalados e identificados.

Al principio dije que el precio de esta cámara había sido superior a los que se suelen encontrar en la zona baja del rango. Es verdad. Pero, tiene una justificación, de lo contrario hubiera esperado que saliera una a un precio por debajo de lo pagado.
La cámara venía equipada con su flash específico y, como verán más adelante, le queda que ni pintado.
El flash es el Polaroid Polatronic 5. Nada se sabe de su número guía pues, nada pone en él. Quizás lo pondría en sus instrucciones pero, a mi me ha llegado así, a pelo.

En cuanto me llegó, lo primero que hice fue ponerle pilas y acercar la oreja para oir el suave pitido que hacen los flashes al cargar el condensador pero, no se oía nada. Proble varias veces y, nada de nada. Decepción. Pero, es verdad que el vendedor me dijo que no podía garantizar el funcionamiento del tándem ya que lo tenía de adorno desde hacía años.

Pues, nada. A desmontarlo. ¡Qué desastre! Alguien lo tuvo con las baterías puestas durante demasiado tiempo y estaba lleno de ácido.

La verdad es que si consevaba el ácido es que el asunto no podía ser de varios años pero, bueno. No voy a discutir.
Lo desmonté por completo, limpié el ácido, lo rocié con alcohol isopropílico y lo sequé bien.

Lijé bien los contactos de donde se alojan las baterías. Otra pista de que no hacía mucho que pasó lo que pasara con este flash es que los contactos y los muelles estaban ligeramente oxídados, sobre todo los que estaban en contacto con el polo negativo de las baterías pero, no había falta de material metálico en ellos. Por eso con un simple lijado volvieron a tener la continuidad requerida.




Le di alimentación mediante un portapilas con pinzas que tengo para estas ocasiones y no hizo absolutamente nada. Decepción. Pero, claro está que si no le doy al interruptor de encendido tararí que te vi. ¿Qué quieren que les diga? Me hago mayor. Lo encendí y «puuuuuuuiiiiiiiiiiii». ¡Cargaba!


Ya que estaba totalmente desmontado aproveché para limpiar bien los circuitos, afalcar el condensador en su sitio, que con el paso del tiempo la espumilla se había degradado y el pegamento que sujetaba al propio condensador se había cristalizado. Lo volví a montar todo y una vez hecho lo volví a probar. Ya saben. Lo del Murphy ese y tal. Perfecto. Funciona perfectamente.
Pero, unos minutos antes, también es verdad, compré otro en Wallapop por 15 euros, en su caja. Puesto en casa por 20,40 euros. Por si acaso. Pueden verlo aquí mismo.




Bueno, el caso es que el flash, por fuera, está impecable y, ahora, por dentro está…funcional. Pasé una tarde entretenida arreglando este flash y otro, que también me llego sin funcionar, de una Polaroid SX-70. Ambos ya están funcionando, aunque del otro me ha sobrado una pieza que no se como volver a poner en su sitio pero, como todo funciona perfectamente, mejor no lo toco más.
Como dije, este flash es específico para este modelo, no se si también para la Polaroid PolaSonic AutoFocus 5000. Por eso la cámara tiene unas muescas en sus lados para el montaje del flash.




Para instalarlo en la cámara hay que hacer coincidir las sujeciones de los brazos del flash con las muescas, a la vez que se insertan sus contactos en las ranuras de la zapata para flash de la cámara.




En el brazo izquierdo, el flash, tiene una corredera para poder fijarlo a la cámara y no se mueva, evitando así que se suelte accidentalmente.
Aquí lo tenemos sin asegurarlo.


Y desplazando la corredera del seguro hacia adelante lo dejamos fijado.


Y así ha de quedar finalmente.


La cámara, con el flash puesto queda imponente. Es una máquina preciosa cuando está completa.






Por cierto. Monté al revés la plaquita que indica si el interruptor de encendido está en OFF o en ON. Debería verse rojo cuando está en ON. Ya está bien puesto, como puede verse en la siguiente foto..





El flash funciona con 4 pilas AA alcalinas.








Dentro del receptáculo de las baterías tenemos unas etiquetas que nos indican la correcta posición de las mismas para no equivocarnos con la polaridad de la alimentación.


Y hasta aquí la presentación de esta bonita Polaroid de finales de los 70. En breve le insertaré un cartucho Polaroid 600 con el filtro ND puesto y saldré a probarla, con y sin flash pero, aprovecharé alguna ocasión especial, por aquello de los 2,5 euros que nos cuesta cada vez que le damos al botón. Un saludo y muchas gracias.
Hola:
Gracias por la revisión de este modelo. No sabía que las hicieron en ese color, queda mejor que el negro, al menos es diferente.
Lo del sónar es llamativo. Desde luego ocupa media cámara. ¿Quizá lo consiguieron reducir un poco en modelos posteriores?
Ya veremos los resultados fotográficos con este modelo y el uso del filtro para compensar la sensibilidad de la película.
Saludos.